La temporada del Mantova ha sido compleja y llena de desafíos, pero al final se ha logrado el resultado deseado. El equipo rojiblanco ha conseguido la permanencia en la categoría sin necesidad de pasar por los play-out. Este éxito es mérito del trabajo del entrenador Possanzini y de una plantilla bien estructurada, que supo encontrar puntos vitales en los momentos más críticos y acelerar en la recta final hacia el objetivo.
A pesar del ambiente de celebración, no hay tiempo que perder de cara a la próxima campaña. El proyecto del club mantovano deberá demostrar estar de nuevo a la altura, ya que, como se suele decir, confirmarse es más difícil que lograr el éxito inicial. Para esta tarea, es crucial estar bien preparados. En este sentido, no se descartan posibles cambios a nivel directivo, especialmente en el puesto de director deportivo.
El perfil que se está considerando es el de Giuseppe Magalini, quien ha pasado este último año en Bari, un lugar donde la conexión no llegó a florecer completamente. Para el experimentado director, este movimiento significaría un regreso a un club que ya conoce profundamente, ya que vivió una larga etapa en Mantova. Fue director deportivo del equipo rojiblanco durante siete años, desde 2003 hasta 2010. Esto representa un estímulo adicional para recrear la sinergia de aquellos tiempos.