El defensor de Vélez, Valentín Gómez, ha retomado el tema de su fallido traspaso al Udinese en el pasado mercado de invierno, una transferencia que parecía inminente. Según declaraciones a ESPN, Gómez expresó: “Me hicieron llorar en una habitación durante diez días”. Además, confirmó los rumores sobre sus entrenamientos en lugares públicos: “Es cierto que me entrenaba en una plaza”.
Tras la victoria de su equipo contra San Martín, añadió: “Sinceramente, no creo haber estado al 100% para jugar. Marcelo (Bravo) me preguntó durante la semana si estaba preparado y le dije que sí, que lo intentaría al máximo en un lugar donde me había estado entrenando… es verdad lo que se decía, que me entrenaba en una plaza. Esto también es culpa de la directiva de Vélez“.
“Desde este punto de vista, estoy algo molesto porque somos responsables del mal momento que estamos viviendo, pero las condiciones en las que entrenamos no son las mejores, el campo no está en óptimas condiciones, el vestuario necesita reformas. Hay muchas cosas que se deben hacer para asegurar que Vélez siga siendo lo que es: un gran club. El gimnasio que tenemos no es adecuado para un equipo de Primera División. Sería bueno que demostraran su parte de responsabilidad”, concluyó el defensor de Vélez.
